Cuando me mude a esta casa, tuve que aprovechar muchos cosas, entre ellas este mueble que compre en madera natural, y la teñí en tono verde muy fuerte, porque es lo que se llevaba.

Así que mientras los pintores hacían su faena, yo me dediqué a mi restauración.
La primera idea era quitar el espejo, pero esta pegado y sujeto de tal manera que me fue imposible. Casi estropeo el mueble en el intento, así que decidimos dejarlo y ya esta.
Empecé dando una limpieza con un paño humedecido en acetona, para retirar grasa y cera.
Luego tres manos de pintura acrílica en blanco, y una en tono gris.
Le puse unas flores muy suaves de una servilleta y dos manos de barniz, para protegerlo.
Espero que os guste.
Disfrutar del verano, que luego el invierno es larguísimo.
Muchos besos.
Te ha quedado precioso. Es genial y seguro que luce muy bien en tu casa recien pintada.
ResponderEliminarGracias Leonor. No puedo responderte por correo porq me sale noreplay. Arreglarlo. Un beso.
EliminarMe gusta como te quedo
ResponderEliminarUn saludo
Te ha quedado genial , que buenas manos tienes.
ResponderEliminarMe gusta la forma del mueble ; )))
ResponderEliminarEl resultado es estupendo!